1991/92: El Nápoles, bajo la dirección de Claudio Ranieri , tuvo dificultades para mantener el nivel de la era Maradona. Con la marcha del astro argentino en 1991 tras una suspensión y una polémica, el equipo se apoyó en Careca , Gianfranco Zola y Ciro Ferrara . Terminó cuarto en la Serie A , mostrando destellos de calidad, pero sin la consistencia necesaria para competir por el Scudetto.
1992/93: La transición se profundizó con el descenso del Nápoles al 11.º puesto , reflejo de la inestabilidad y las dificultades económicas. Si bien Zola emergió como la nueva fuerza creativa, la plantilla carecía de profundidad. No lograron la clasificación europea y sus participaciones en las copas nacionales fueron cortas, marcando un declive tras su etapa dorada de finales de los 80.
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1991/92: El Nápoles, bajo la dirección de Claudio Ranieri , tuvo dificultades para mantener el nivel de la era Maradona. Con la marcha del astro argentino en 1991 tras una suspensión y una polémica, el equipo se apoyó en Careca , Gianfranco Zola y Ciro Ferrara . Terminó cuarto en la Serie A , mostrando destellos de calidad, pero sin la consistencia necesaria para competir por el Scudetto.
1992/93: La transición se profundizó con el descenso del Nápoles al 11.º puesto , reflejo de la inestabilidad y las dificultades económicas. Si bien Zola emergió como la nueva fuerza creativa, la plantilla carecía de profundidad. No lograron la clasificación europea y sus participaciones en las copas nacionales fueron cortas, marcando un declive tras su etapa dorada de finales de los 80.